Hidrología en Suprema Corte Provincial. 67491 . 1 . 2 . 3 . 4 . 5 . 6 . 7 . 8 . 9 . 10 . 11 . 12 . 13 . 14 . 15 . 16 . 17 . . 69518, 519, 520 . 18 . 19 . 20 . 21 . 22 . 23 . 24 . 25 . 26 . 27 . . 70364 . 217 . . 70751 . 28 . 29 . 30 . 31 . 32 . 33 . 34 . 35 . 36 . 37 . 38 . 39 . 40 . 41 . 42 . 43 . 44 . 45 . 46 . 47 . 48 . . 71368 . 50 . 51 . 52 . 53 . 54 . . 71413 . 55 . 56 . 57 . 58 . 59 60 . . 71445 . 55 . 56 . 57 . 58 . 59 . . 71516 . 60 . 61 . 62 . 63 . 64 . 65 . . 71520 . 66 . 67 . 68 . 69 . 70 . 71 . 71521 . 71 . 72 . 73 . 74 . 75 . . 71542 . 76 . 77 . 78 . . 71614 . 79 . 80 . 81 . . 71615 . 82 . 83 . 84 . 85 . 86 . . 71616 . 87 . 88 . 89 . 90 . 91 . . 71617 . 92 . 93 . 94 . 95 . 96 . . 71618 . 97 . 98 . 99 . . 71619 . 100 . 101 . 102 . . 71413 . 103 . 104 . 105 . 106 . 107 . . 71743 . 108 . 109 . 110 . . 71808 . 111 . 112 . 113 . 114 . 115 . . 71848 . 116 . 117 . 118 . 119 . 120 . . 71857 . 121 . 122 . 123 . 124 . 125 . . 71908 . 126 . 127 . 128 . 129 . 130 . 131 . . 71951 . 132 . 133 . 134 . 135 . . 71936 . 136 . 137 . 138 . 139 . 140 . . 72048 . 141 . 142 . 143 . 144 . 145 . . 72049 . 146 . 147 . 148 . 149 . 150 . . 72089 . 151 . 152 . 153 . 154 . 155 . 156 . . 72404 . 157 . 158 . 159 . 160 . . 72405 . 161 . 162 . 163 . 164 . . 72406 . 165 . 166 . 167 . 168 . 169 . . 72512 . 170 . 171 . 172 . 173 . 174 . 175 . 176 . 177 . 178 . 179 . 180 . 181 . 182 . 183 . 184 . 185 . . 72592 . 186 . 187 . 188 . 189 . 190 . . 72832 . 191 . 192 . 193 . 194 . 195 . . 72994 . 196 . 197 . 198 . 199 . 200 . . 73038 . 201 . 202 . 203 . 204 . 205 . . 73114 . 206 . 207 . 208 . 209 . 210 . . 73147 . 211. 212 . 213 . 214 . 215 . . 73406 . 216 . 217 . 218 . 219 , 220 . . 73429 . 221 . 22 . 223 . 224 . 225 . . 73641 . 226 . 227 . 228 . 229 . 230 . . 73717 . . 231 . 232 . 233 . 234 . 235 . . 73748 . 236 . 237 . 238 . 239. 240 . . 74024 . 241 . 242 . 243 . 244 . 245 . 246 . 247 . 248. . 74719. 249 . 250 . . 45090 CABA . 251 . 252 . 253. 254 . 255 . 256 . 257 . 258 . 259 . 260 . 261 . . 45232 CABA . 262 . 263 . 264 . 265 . 266 . 267 . . 16191 CABA . 268 . 269 . . CCF4817 . 270. . CAF21455 . 271 . 272 . 273 . 274 . 275 . 276 . 277 . 278 . 279 . 280 . 281 . 282 . 283 . . CAF25337 284 . 285 . 286 . . CAF37039 . 291 . 292 . 293. 294 .295 . 296 . 297 . 298 . 299 . 300 . 301 . 302 . 303 . 304 . 305. 306 . . CAF84260 . 311 . 312 . 313 . 314 . 315 . . FSM 65812 . 320 . 321 . 322 . 323 . 324 . 325 . 326 . 327 . 328 . 329 . 330 . 331 . 332 . 333 . 334 . 335 . 336 . 337 . 338 . 339 . 340 . 341 . 342 . 343 . 344 . . FSM9066 . 351 . 352 . 353 . 354 . 355 . . FSM 38000 . 361 . 362 . 363 . 364 . 365 . 366 . 367 . 368 . 369 . . FSM 49857 . 370 . . FSM 54294 . 371 . 372 . 373 . FSM 56398 . 374 . 375 . 376 . 377 . 378 . 379 . 380. 381 . 382 . . JFCampana . 383 . 384 . 385 . 386 . 387 . 388 .389 . 390 . 391 . 392 . 393 . Corte Suprema de Nacion . D 179 . 400 . 401 . . D 473 . 402 . 403 . 404 . 405 . 406 . . 407 . . D 412 . 408 . . CSJ 98 . 409 . . CSJ 1698 . 410 . 411 . 412 . . CSJ 791 . 415 . 416 . 417 . 418 . 419 . 420 . 421 . 422 . 423 . 424 . 425 . 426 . 427 . 428 . 429 . 430 . 431 . 432 . 433 . 434 . . CSJ 936 . 441 . 442 . 443 . 444 . 445 . 446 . 447 . 448 . 449 . 450 . . CSJ 1525 . 456 . 457 . 458 . 459 . 460 . 461 . 462 . 463 . . CSJ 1646 . 470 . 471 . . CSJ 2605 . 475 . 476 . 477 . . CSJ 2841 . 480 . 481 . 482 . 483 . 484 . . CSJ 769 . 490 . 491 . 492 . 493 . 494 . 495 . 496 . 497 . 498 . 499 . . CSJ 770 . 500 . 501 . 502 . 503 . 504 . . CSJ 794 . 505 . 506 . 507 . 508 . 509 . . 35889 patrimonios rurales 510 . 511 . 512 . 513 . 514 . 515 . 516 . 517 . 518 . 519 . 520 . 521 . . hidrolinea . . codigo . 1 . 2 . . cartadoc fiscalFed . . cartadoc JuzgFed . . Cartadoc Scioli . . Cartadoc Massa . . Cartadoc CF Rudi . . Cartadoc Macri . . cartadocvidal . . cartadockicillof . . cartadocsimone . . Cartas Doc Conte Grand . 1 . 2 . declaratoria . . declaratoria FGSI . . Cartas Doc a SCJPBA: cartadocSoria . . cartadocdeLazzari . . acceso al habitat . . nuevo paradigma 1 . 2 . 3 . 4 . 5 . . esacasoelagua . . interlocucion 1 . 2 . 3 . 4 . 5 . 6 . 7 . . dragados . . tolosa 1 . 2 . 3 . 4 . 5 . 6 . . Ley 25688 . 1 . 2 . 3 . . discurso . . Ley particular . . decreto1069 . . OCSA . . dominios públicos . 1.2.3 . 4 . 5 . 6 . 7 . 8 . 9 . 10 . . al mejor derecho . . Ariza . . CAF . denuncia BID . . Gladys González . . censura previa ..sentencia .. huevos.fueros . . sincerar . . costadelplata . . nativas . . EIACostadelPlata .. Puerto ampliación . 274 . . abismos . . antena . 1 . 2 . 3 . 4 . . trama forense 1 . 2 . 3 . 4 . 5 . 6 . 7 . 8 . 9 . 10 . 11 . 12 . 13 . 14 . 15 . 16 . . acuerdo . . vientos forestales . . index .

Ver causa CSJ 794/2020

V . de las prospecciones en la barra del Globo

Para completar los enfoques de esta demanda judicial que alerte de sus obligaciones al Ejecutivo y Legislativo en el marco del art 75, inc 15, en el de los arts 1º, 2º y 3 de la ley 23879 y en el del primer enunciado del par 2º, art 6º de la ley 25675, cabe solicitar la prospección de las áreas de la barra del Globo donde se presentan los problemas del canal Buenos Aires, que de no mediar sorpresas con afloraciones precámbricas, parece mucho más refulable que los granitos de Martín García y si así fuera, esta salida natural para la hidrovía sería bendición.

Aclaro que mi Querida Madre era uruguaya, fui engendrado en Montevideo y quiero mucho a su pueblo, pero esto no me impide rescatar el valorque el ninguneado canal Buenos Aires tendría para las salidas de naves con 44 pies por el Guazú, si estudiamos y encontramos solución a los fondos en la barra del Globo.

 

VI . La represa de *Kweks de AySA

la barrera infernal de efluentes de los emisarios de AySA cruzados a las ya exiguasdinámicas del estuario, que precipitarán de inmediato por brutal capa límite térmica e hidroquímica a la salida de las inútiles pretendidas bocas difusoras, será el golpe mortal a todo este sector del estuario encerrado entre el frente deltario, estas barreras de *Kweks, la costa urbana y los refulados del Emilio Mitre. 120 Km2 con tan solo 80 centímetros de profundidad promedio, que condenarán a muerte a la Reina del Plata. Del agua de AySA mejor ni hablemos.

Ver http://www.alestuariodelplata.com.ar/abismos.html

Este infierno ha sido planteado en la causa CSJ 791/2018 y propone como primer paso un ajustado proceso de conocimiento, que habiendo planteado a págs 106 a 112 de esta demanda, ahora cabe reformularlo para evitar la vía presencial y resolverlo haciendo fiscal y peritos a este actor las preguntas que caben en el marco del 1º de los 4 enunciados del par 2º, art 6º , ley 25675 y éste responder mediante video o pdf que no exceda la 1,5 hora de lectura. Y así, hasta sumar las 50 horas. Al cabo de este proceso cabe estimar que el interés respecto del abismo newtoniano una y mil veces planteado, resulte bastante mejor iluminado.

 

VII . Noticias de la hidrovía

Dragado: El Niño cuesta trabajo y plata

Nota de Emiliano Galli, La Nación, Martes 12 de Abril del 2016

El fenómeno climático obligará a Hidrovía, el concesionario del mantenimiento y señalización, a traer nuevos equipos y erogar US$ 60 millones adicionales; precisiones sobre el costo del peaje

Cuando las obras de ampliación del Canal de Panamá se encuentran terminadas en un 97%, las drásticas condiciones climáticas provocadas la corriente de El Niño obligaron a la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) a introducir nuevas restricciones de calado a partir del 29 de este mes para todos los buques.

La inusual sequía derivada del fenómeno climático redujo significativamente el nivel de agua del lago Gatún. Así, los buques transitan con un calado máximo de 11,74 metros.

En la Argentina el impacto ambiental es similar salvo por el hecho de que se manifiesta con un exceso de lluvias, lo que entre otras cosas afecta el mantenimiento de la vía navegable Paraná-Paraguay y el Canal Emilio Mitre, a cargo del concesionario Hidrovía, empresa controlada por la dragadora belga Jan De Nul y el grupo local Emepa.

La nueva draga de corte que traerá el concesionario llegará en mayo. "Está costando mucho mantener las profundidades", señalaron desde el concesionario.

Históricamente se trabajaban con 3/ 4 dragas, con un pico histórico de 5. Con el efecto El Niño aumentó el nivel de agua, lo que en principio ayuda a la navegación. Pero hacia la segunda mitad de enero, y febrero, ya fueron necesarias 6 dragas de succión por arrastre.

"Los peores momentos no son durante la creciente, sino con la bajante, porque aumenta la solera (?!) y crece la sedimentación, al tiempo que el nivel de agua en baja. Por eso no llegó lo peor todavía", agregaron.

Los mayores problemas se dan en el Canal Emilio Mitre, donde en simultáneo operan 4 dragas, algo nunca visto. "No obstante, siempre mantuvimos los 34 pies y el ancho total", recordaron.

Nuevos equipos

Jan De Nul trajo la Pedro Álvarez Cabral, una draga de succión por arrastre, de 14.000 metros cúbicos de cántara (una capacidad que equivale a tres de las dragas actualmente en uso) para aliviar la situación.

La mayor preocupación reside en que el fin de El Niño, con la bajante, coincida con el pico del invierno.

"Estamos trabajando en el Emilio Mitre, instalando cañerías porque vamos a traer una draga de corte, la Niccoló Machiavelli (foto), para mayo", indicaron. Sucede que los dos pozos donde se depositaban los sedimentos están cerca de su capacidad total con el trabajo simultáneo de las 4 dragas.

Esta draga es la tercera más grande de las que opera Jan De Nul en el mundo."Estamos haciendo un esfuerzo nunca visto porque la sedimentación obliga a esto", agregaron.

Estas dos nuevas dragas deberán quedarse alrededor de cinco meses. Llegarán desde Panamá y República Dominicana. La cañería viene de tres lugares distintos y deberá ser instalada con un multipontón, una obra que en total demandará 5 millones de dólares.

Fuentes de Hidrovía señalaron además que este fenómeno se complica todavía más con el de los camalotes, que arrastra las señales de la vía navegable. "Además de la profundidad tenemos que mantener la señalización en un momento crítico porque coincide con la cosecha y con un mayor movimiento de buques"

El concesionario aseguró que deberá enfrentar un gasto adicional de 60 millones de dólares este año por la dedicación de las nuevas dragas y el mantenimiento en la señalización. Estiman, además, que en 2016 dragarán el doble del volumen promedio.

"Es un esfuerzo muy grande para cumplir el contrato, como siempre hicimos, con la misma tarifa, manteniendo el canal", destacaron las fuentes consultadas. Esta obra cobra todavía más dimensión en comparación con la situación del Canal Martín García, menos relevante, que no logra superar los 7,32 metros de profundidad.

Números polémicos

Desde el concesionario respondieron a quejas que surgieron en el sector respecto del costo del peaje de la hidrovía y el posible impacto que tiene en la competitividad del comercio exterior argentino.

"El peaje de la hidrovía en el costo total de un contenedor representa el 4%", puntualizaron, tras añadir que "lo que nos pagan a nosotros (las navieras) lo recuperan bajo el concepto de toll fee".

"Vamos a tener siete dragas trabajando, empleamos 500 personas, tenemos siete balizadoras y cobramos de peaje a los portacontenedores 44 millones de dólares por año. Otros cobran, también, pero sin garantía de cumplimiento de obras, sin pagar seguros, y es mucho más de lo que percibimos nosotros por todo el trabajo que hacemos. Cobramos US$ 70 por contenedor", afirmaron, en una cuenta que surge de dividir lo facturado por los aproximadamente 600.000 contenedores operados en 2015.

"El toll fee que cobran supera los US$ 120", apuntaron. Los porta contenedores representan alrededor del 25% del movimiento por el canal, y un 50% corresponde a buques de la zona de Rosario.

A propósito, subrayaron: "El costo del peaje en una tonelada de soja es US$ 1,30 para salir de Rosario al océano en condiciones seguras y navegando las 24 horas los 365 días, y en lo que va del año más de 100 buques ya salieron con más de 34 pies, sin pagar peaje extra por ese adicional", remarcaron, y completaron: "En cruceros, por la última campaña, cobramos en peaje US$ 8,5 millones, que prorrateado entre tripulantes y cruceristas dio un costo de US$ 18 dólares por persona", ampliaron.

Si se cae la profundidad, como cayó en el Martín García, corre riesgo la salida de la cosecha, la principal fuente de ingresos de divisas del país.

La última creciente de proporciones, similar a esta, fue en 1983. Entonces se "perdió" el Canal Emilio Mitre, quedando a 22 pies. "Por eso hay cinco dragas, a la que sumamos una más (que equivale a tres de las que operan hoy), más otra draga de corte, para evitar que esto pase", indicaron desde el concesionario.

Claramente, la contingencia de perder un pie de calado en una sección del canal representa para Hidrovía el incumplimiento del contrato. Si eso pasa, no cobra nada. El concesionario reveló estos números en un estudio que será sujeto a certificación, y dejó de lado su tradicional perfil bajo para "poner en contexto" los costos del comercio exterior.

"Queremos decir que somos los que mantenemos la vía navegable y tomamos el riesgo. Y que se sepa que el peaje representa el 4% de cada contenedor y 1,6 dólares por tonelada de soja. Y esos costos, que son los más bajos en total, son los que permiten que salgan las exportaciones argentinas e ingresen las divisas", concluyeron.

Mi comentario a esta nota

Ya que acerca Estimado Galli el ejemplo del canal de Panamá aprovecho para señalarle, que así como en la salida al Pacífico de este canal extraordinariamente ejecutado en términos mecánicos, luce el troglodítico desconocimiento de la ciencia hidráulica para inferir los viajes de los sedimentos y las energías que en condiciones normales los transportan –que no son gravitacionales, sino convectivas-, y por ello la feroz convección externa en esa salida; así también en nuestra mucho más complicada salida estuarial por el Emilio Mitre nos hemos dado y nos seguimos dando el lujo de hacer todo tipo de burradas, para incluso tapar algunos infortunios.

Tal el caso de la draga de corte con que Jan de Nul atendía el contrato firmado en 1967, que hace aprox una década fue enviada para hacer una changa a Centroamérica y se les quemó para nunca más volver a refular con draga de corte (a excepción hace unos años y por un par de semanas con la flamante y extraordinaria Batuta), sino con dragas de arrastre que por entonces fueron aportadas por el Estado Nacional.

El caso es que los vuelcos de estos barros al Sur del Km 26 tienen un costo en la sobrevida del pobrecito estuario, que nadie quiere imaginar. El descalabro mundial que tienen en sus narices en un área de aprox 120 Km2 con una profundidad promedio que no supera los 0,80 m, es trillones de veces más grave que los problemas del Emilio Mitre.

La diferencia es que las urgencias del canal reconocen todo tipo de alertas mecánicas. Ninguna en cambio va a a inferir las vicisitudes que ya carga el destino mediterráneo de Buenos Aires por esta aplicación a mirar por las cuestiones del corto plazo y dejar en el olvido las otras cuya gravedad, reitero,  Ud. no alcanza a imaginar.

Durante años Hidovía vino realizando batimetrías de las zonas donde se arrojaban esos barros y tengo constancias de haberlas solicitado y haber recibido solo una vez respuesta que los estimulaba a apreciar estos seguimientos, que al menos alguien se interesaba por ellos.

Un desencuentro con dos físicos en dinámica costera que por entonces trabajaban en el Servicio de Hidrografía me obligó a dejarlos seguir con sus cegueras académicas en sus cajitas de marfil y cultivar mis propios senderos en estas materias de las que no menos de 30 millones de caracteres subidos a la web dan cuenta.

Hoy su nota nos señala que esos 2 pozos están a punto de saturarse. Pida Ud batimetrías de esas áreas antes de comenzar allí los vuelcos y proyecte sus consecuencias en el estado catatónico que ya entonces exhibían los flujos ribereños de toda la gran metrópoli. Que no es solo el Emilio Mitre lo que cuenta en la mirada integral que debería tener la SSPyVNN. No extiendo la escala de esas consecuencias porque no es este el espacio para fecundar la siembra de estas semillas de conciencia.

Pero de todas maneras insisto en señalar que los sedimentos no son arrastrados por los imaginarios flujos laminares con que siempre fueron modelados estos corredores de flujo que cuentan con una docena de boyas para estimar en términos mecánicos sus energías.

Hasta que no miren por energías convectivas y adviertan que solo ellas tienen la virtud de transportar sedimentos, seguirán padeciendo, amén de las consecuencias de las recurrentes bajantes, del desconocimiento del por qué sedimentan, siendo el caso de que no hay mecánica de fluidos que lo haya explicado en modelización. Verificar sedimentaciones como hizo Halcrow en 1967, no es explicar

La Dra Agnes Patterson a cargo de todas las cátedras de Hidráulica de la UBA y de todos sus equipos de investigación está algo más alertada, aunque no menos abismada por meter las narices en fenomenologías termodinámicas que por el momento la advierto como la única ventana para mirar estas materias.

Comenzar a entender de sistemas termodinámicos naturales abiertos les permitirá salir de las cavernas del paleolítico en que vive refugiada la ciencia hidráulica, cargando consecuencias que nadie quiere ver, ni imaginar por dónde empiezan. Las miradas no son simples, sino complejas. Pero en esa complejidad irán bordando las delicadezas con que tienen que ser obradas esas canalizaciones

Festejo con alegría que Ud no imagina, la devolución de la draga de corte a estas tareas. Pero lamento que no tengan enhebrada en el alma una mirada al devenir mediterráneo de Buenos Aires y la importancia estratégica fundamental que cabe a esas tareas. Hoy a pesar de que la noticia es algo más que bienvenida, no tengo dudas que seguirán actuando como ciegos a los que espero ayude la Divina Providencia

Un saludo cordial, Francisco Javier de Amorrortu, 12 de Abril del 2016

 

Luciendo contradicciones en “crecientes y bajantes”

El informe de Hidrovía S.A. publicado en el diario La Nación del 12/4/2016 señalaba: La última creciente de proporciones, similar a esta, fue en 1983. Entonces se "perdió" el Canal Emilio Mitre, quedando a 22 pies.

Al mismo tiempo señalaban:"Los peores momentos no son durante la creciente, sino con la bajante, porque aumenta la solera (?!) y crece la sedimentación, al tiempo que el nivel de agua en baja. Por eso no llegó lo peor todavía", agregaron.

En la Argentina el impacto ambiental se manifiesta con un exceso de lluvias, lo que entre otras cosas afecta el mantenimiento de la vía navegable Paraná-Paraguay y el Canal Emilio Mitre, a cargo del concesionario Hidrovía, empresa controlada por la dragadora belga Jan De Nul y el grupo local Emepa.

Las contradicciones en estas aseveraciones resultaban inexplicables. Por versión directa de boca del entonces Director de Dragado y Balizamiento Agr Fenández, las sedimentaciones escandalosas se producían en las fuertes bajantes.

Todo el concepto proyectado por Halcrow aprobado en 1967 y modelizado en sus laboratorios de Inglaterra con estudios previos de flujos y sedimentaciones evaluadas con trazadores radioactivos, apuntó a generar un sistema de ventury que robaría energías al sistema de salida del Paraná de las Palmas que ya había sufrido a comienzos de siglo XX el abandono de la salida principal al Norte de ésta, que ahora también quedaba abandonada para favorecer la salida por el arroyo Las Víboras, eje de salida elegida para la traza del Emilio Mitre.

En estos esquemas siempre primó el concepto hidrodinámico: a mayor energía cinética, menor deposición sedimentaria. Nunca se hizo mención al clima, hasta que las noticias del cambio climático se pusieron de moda. Nunca se infirieron otras energías que gravitacionales. Nunca se alertaron de la definición que de la voz “ecosistema” nos acerca el glosario de la ley prov 11723, apuntando a la necesidad de mirar los ingresos de energía solar, por termodinámica de sistemas naturales abiertos y por sedimentos, sus salidas.

El control hidrodinámico en la traza del canal se realiza mediante 12 boyas que recogen la información de los flujos, sin conocer quien ésto suscribe, si lo hacen a distintos niveles de la columna de agua o simplemente en superficie.

Esta observación cuenta porque es en los fondos donde guardan la memoria de sus tránsitos los sistemas convectivos, calificados por los mecanicistas como “turbulentos verticales”

El caso es que nunca hicieron planteo alguno de deposición sedimentaria por capa límite térmica; siendo que bastan 0,2º para disociar las aguas y proceder a sedimentación.

En adición, es necesario recordar que las advecciones de estos sistemas convectivos están determinados por gradientes de ligera menor temperatura

Y es obvio que su desconocimiento les permite ignorar las torpezas a que conduce este aberrante ventury, que nunca respetó perfiles longitudinales ni transversales apropiados para intercambiar calor dentro de los estrechos límites que habilita el delicado gradiente mencionado.

En un sistema torpemente acelerado, profundizado y estrechado, a su salida al estuario se topará de bruces con un gradiente térmico inverso al que corresponde a sus advecciones y en adición, generador de precipitaciones por grosera capa límite térmica.Más bruta prepotencia mecánica, imposible.

Cuanto mayor sea la bajante ese contraste térmico aumentará y esa capa límite hará desastres en el sistema proyectado con ojo mecánico.

Las sedimentaciones serán tan espantosas como lo vienen declarando.

La profundización del canal hace cada vez más críticos los resultados del mantenimiento esperado. Lo que cuenta para disminuir en algo esta problemática es obrar un perfil transversal suave en los extremos de la solera, que permita el enlace de las energías convectivas que siempre vienen transferidas desde las márgenes por costas blandas y bordes lábiles a la sangría mayor, tanto en riberas afloradas como en planos sumergidos. Relaciones que nunca han sido estimadas por considerar que solo ralentizaría la velocidad del troglodítico ventury donde están concentradas todas las esperanzas de buen funcionamiento del sistema.

El caso es que no solo estas áreas del Paraná y del estuario reconocen pendientes miserables del orden de los 4 mm/Km y por ello ninguna otra energía que convectiva alimenta los flujos ordinarios de este ecosistema fluvial con entrañables lazos ecológicos con sus esteros aledaños y con sus sedimentos, sino que ya el promedio de tan solo 5 cm de pendiente por km en los 2100 km de recorrido total le acreditan a sus flujos ordinarios solo este tipo de energías: las que le vienen transferidas de contínuo desde sus esteros aledaños, con la adición de las reservas acumuladas en sus sedimentos para viajes extraordinarios hasta el más profundo océano. http://www.alestuariodelplata.com.ar/viajesedextra.html

Hasta que los ingenieros de Hidrovía no empiecen a mirar, entender y respetar los contenidos que el glosario de la ley 11723 le regala a la voz “ecosistema”, seguirán tan despistados como sus contradictorios informes.

 

VIII . Del inevitable proceso cognitivo

Promuevan V.E. aprecio a enfoques propios de ecologías de ecosistemas hídricos en planicies extremas. En especial: de aguas someras. Pues ese es el futuro que espera a nuestra urbe; en tanto hoy los mecanicistas sólo cultivan ceguera.

La voz “estuario” apunta a lo que se quema, a lo que se calienta, a lo que se prende fuego. Así lo señala la raíz indoeuropea: *aidh, quemar. Voces emparentadas a "estuario": estiaje: caudal mínimo de un río, estero o laguna; estuante: encendido, excesivamente caliente. De aquí también: estío y estero. Nunca alcanzaría la termodinámica de sistemas naturales abiertos y enlazados a ser ajena a estos delicados ecosistemas en planicies extremas.

UBI NON EST IN ACTIS NON EST IN MUNDIS, decía el pretor romano. en tiempos en que no se pensaba global y actuaba localmente Hoy lo que está en la realidad, (no in actis, tal vez por omisiones formales), es 1º) los ecosistemas estuariales represados por obranzas “hidráulicas”; 2º) el incumplimiento de debidos procesos; 3º) el consiguiente drama ambiental, naviero y comercial. Ver este http://www.alestuariodelplata.com.ar/alosriosyesterostributariosdelestuariodelplata.pdf

O este http://www.alestuariodelplata.com.ar/humedal43.html

No interesa como ingresa a la jurisdicción; lo que importa es que  no sean las cuestiones formales las que cierren las puertas al conocimiento de V.E.; que como han dicho en la causa Mendoza, tienen que extremar diligencia y flexibilizar las normas rituales para adentrarse en el conocimiento de una realidad calificada por art 4, ley 25675.

Imponerse del conocimiento habilitando el proceso sugerido a pág 106 a 112 de la causa CSJ 791/2018, para debatir y probar cuanto en ésta estoy peticionando en pro del conocimiento y el cuidado del equilibrio de las dinámicas de los sistemas ecológicos; en pro de respetar su capacidad de carga; en pro del bien común, de un ambiente sano para nosotros y las generaciones futuras, abriendo estas ventanas a mucho más originales aprecios; que ya V.E. encontrarán el sentido y la forma que del considerar trascienda al obrar.

Con las experiencias vividas en esta pandemia, el proceso cognitivo sugerido a págs 106 a 112 de la CSJ 791/2018 cabe sea simplificado por el envío de las preguntas que debe responder este actor en el estricto marco del primer enunciado del par 2º, art 6º, ley 25675, que aplicaría a ellas respuestas cuyas lecturas no excedan de una hora y media; y así, hasta completar las 50 horas. No es necesario tener oyentes presenciales, ni cámaras de filmación. Y todos recibirán la misma información bien ilustrada, sin necesidad de cumplir horarios y conservando la máxima libertad para su atención.

El conocimiento nos hace libres. Así confío y por Vuestros estímulos insisto.

 

A un nuevo puerto “Alflora” de aguas profundas

http://www.alestuariodelplata.com.ar/puertoalflora.html

http://www.alestuariodelplata.com.ar/pendientes5.html

http://www.alestuariodelplata.com.ar/pendientes6.html

http://www.alestuariodelplata.com.ar/pendientes8.html

http://www.alestuariodelplata.com.ar/disocio2.html

 

Re-flexiones 

Guía para moderadores del fuego que anima al agua, que tanto complace verla modelarse en gravedades

Sólo he incluído unas pocas imágenes, porque necesito hacer sentir sus ausencias. Una suerte de deconstrucción a la inversa: 1º la conceptualización y su vacío para poner a prueba nuestros recursos intelectivos y por fin lo sensorial, para dar respiro. La imágenes van por /confesiones11.html

Esta deconstrucción es la que aplican los modeladores matemáticos haciéndonos tragar fabulaciones gravitacionales extrapoladas de la galera de Newton.

1º. El por qué mirar a los flujos ordinarios

Porque son ellos los que se ocupan de dispersar nuestras miserias. Por cierto que, también los eventos máximos se ocupan de estas tareas, pero… con la inclusión de todo tipo de obranzas que afectan a los primeros. En áreas periurbanas son resueltos con alteos en las riberas y en las urbanas, con entubados. Aquí debemos pasar al punto siguiente

2º. El por qué diferenciar flujos laminares, de convectivos turbulentos verticales

La ciencia hidráulica reconoce los dos tipos, pero casi en exclusivo modela con los primeros y esquiva la complejidad de los segundos, aunque sean los únicos que cuentan en planicies extremas.

He visto los flujos del extraordinario corredor de los Pozos del Barca Grande planchados como un espejo sacando camalotes a velocidades infernales. Abajo de ellos estaban los rodamientos maravillosos de las energías convectivas cargadas de sedimentos, que desde el Bemejo venían sosteniendo esa alfombra superior que era sólo su reflejo.

Llegado al Emilio Mitre y enfrentado a las aguas mareales, esa alfombra se sacude despavorida como avión en tormenta. Abajo, el torbellino convectivo sigue su camino. 

3º. El por qué fantasear con flujos laminares

Al no haber nunca apreciado abandonar la comodidad de modelaciones en caja negra, ésto es, ámbitos de la modelación donde las energías son inferidas por sus caudales de entrada y de salida sin hacer incapié en su calidad: si fueran gravitacionales o convectivas.

Desde Newton a la fecha dan por sentado que las aguas se mueven por pendiente. Y hasta confunden las turbulencias de los flujos de montaña, con las atribuibles a los flujos convectivos verticales propios de planicies extremas y no tan extremas; y cuyas observaciones son mucho más complejas que las de los inferidos flujos “laminares”, que por ello a los complejos les adjudican el mote de “turbulentos verticales”.

Algunos mecanicistas han ido un poco más lejos para acercarnos los conceptos de flujos convectivos internos naturales positivos; a diferencia de los convectivos externos (o transversales) naturales negativos.

En Natura no hay nada negativo. Y la externalidad es solo el traspaso de un sistema a otro. Estos cambios de sistema siempre están dados por la mayor atracción del gradiente de enlace. Por cierto, la energía del sistema que se adueña de esa transferencia cabe sea estimada mayor. Pero sin ese enlace por gradiente térmico e hidrouímico, ese atrape, si bien corre apareado, lo hace marchando disociado.

Esa es la situación del ramillete de corredores que se acoplan al corredor de flujos estuariales de cruce Alflora. Que no debemos olvidar, guardan memoria de sus tránsitos grabada en los fondos. Eso explica la limpieza del escalón de la Barra del Indio

4º. El por qué de las disociaciones

Hace unos pocos años los oceanógrafos comenzaron a aceptar que el 65% de los flujos océanicos estaban disociados. No entiendo respecto a qué infieren ese porcentaje; porque de hecho, es un universo de disociaciones y asociaciones, tan común y universal como el que cabe a las criaturas que habitan el planeta

Aún les falta descubrir los largos viajes de los corredores tributarios de agua dulce cargados de sedimentos, mucho más allá del borde del talud oceánico. El satélite Aquarius sólo mide el nivel de sal en los primeros 10 cms de la superficie de los océanos. Y estos corredores de agua dulce hacen su camino apoyado en los fondos; por lo tanto, nada los discierne.

5º. El por qué de las advecciones

En un corredor de flujos, ya sea fluvial, estuarial, marino u oceánico, concurren vectores transversales de sistemas asociados por gradientes térmicos apropiados, para concluir en un sistema principal, caracterizada sus resultantes, como advección. 

6º. De las memorias convectivas grabadas en los fondos

Tanto en los ríos, como en los estuarios, las plataformas marinas y los abismos oceánicos, esas advecciones reconocen memoria de sus tránsitos grabadas en los fondos. Allí van esos sistemas verticales rebotando.

En los finales del otoño, invierno y comienzos de la primavera, la reducción del gradiente térmico que determina la amplitud del ciclo vertical, permite al sistema aflorar a la superficie arrastrando los nutrientes depositados en los fondos. Esa manifestación es denominada como floraciones o bloomings. 

7º. De la no formación de cauce.

Amén de la mayor estabilidad térmica que en los fondos reina, el mismo sistema se ocupa de ir dejando huellas sedimentarias depositadas en ellos, que conforman por su suave relieve, lo opuesto a un cauce

8º. De las primarias disgresiones que apuntamos a la palabra “humedal”, que reclama en estas instancias de reflexión, abrir comprensión al menos a dos especificidades: esteros y bañados.

Hace unas décadas comenzó a partir de RAMSAR a ponerse de moda la voz humedal, wetland. Sin embargo, esa generalización vela los beneficios de criterios tan sólo un poquito más complejos. Tal el caso de los esteros y bañados, tan conocidos en nuestros prados anegados, que merecen muy importantes aprecios de sus diferencias.

9º. De las diferencias entre unos y otros.

Sea la imagen el primer recurso para advertir sus diferencias. Que siempre han sido provocadas por la presencia y las obranzas del hombre: el terraplén de un camino cortando las finas hebras conductoras de un estero; un alteo de riberas eliminando las costas blandas y bordes lábiles, bordes de transferencia cuya eliminación implica disociar, cortar los enlaces entre las baterías convectivas y las sangrías mayores.

La misma disociación y aún mayor, la provocada por una limpieza de lecho, que luego amontonada en una de sus riberas provoca alteos de suelos sueltos que favorecen la proliferación de exóticas y éstas, sombras en el curso de agua, precipitando sedimentos y alterando los gradientes que condicionan la advección.

10º. Qué compromisos parentales advertimos entre bañados y suelos anegables.

La relación es plena. La estructura dinámica que descubren los esteros no es en nada comparable a la dispersa y encharcada de los bañados.

Un estero, aunque esté ocasionalmente seco –lo cual es bastante improbable-, conserva huellas de la delicadeza de su organización. Un bañado también conserva huellas, pero, de su desorganización manifiesta en charcos dispersos.

Sin embargo, cuando un bañado se descubre anegado, también descubre su memoria como estero; recuperando sus energías convectivas el lenguaje para moverse en función de infinidad de pequeñísimos microcauces. Sistemas de generación espontánea en su organización, que tras pocos días de manifestarse el anegamiento, traducen en organización plena, el lenguaje de los esteros.

Imagen del río Luján en Zelaya anegado por una lluvia de 300 mm caída después de 40 días sin llover y fotografiado 8 días después de precipitada

11º. Qué función cumplen las costas blandas y los bordes lábiles

La de transferir las energías solares acumuladas en los esteros y bañados aledaños a las pequeñas y grandes sangrías, en el lenguaje propio de las energías convectivas; primero transversales, a poco longitudinales a la advección que descubre la sangría mayor. A esas áreas de acumulación de energía solar llamo baterías convectivas. 1 cm2 de suelo en los esteros de Manaos acopia y transfiere alrededor de un (1) Kw de energía por día.

12º. Cuáles son las diferencias interpretativas de la deriva litoral mecánica y la termodinámica

La deriva litoral fue interpretada mecánicamente por el empuje de una ola oblicua arribando a la ribera en un ángulo aprox. a los 10º.

La interpretación termodinámica la advierte, en su advección, fruto de la energía mareal, conservando hipersincronicidad las 24 hs del día merced a los aportes de las aguas caldas tributarias que fortalecen su entropía (entendida ésta en su sentido primigenio).

Por ello, cuando advertimos la disminución de los caudales tributarios y en particular, por sus menores temperaturas provocadas por sombras o entubados, esa deriva litoral, esa advección debilitada, se transforma en convección externa; cuya transversalidad a 90º de la línea litoral, va en busca del gradiente de enlace con el corredor natural de flujos costaneros a unos cuantos cientos de metros de distancia de las riberas que erosiona sin piedad.

Esto es lo que se advierte en toda la costa bonaerense desde Punta Lara hasta Punta Piedras, e incluso más al Sur, hasta la boca del Salado.

Reitero, este tipo de energías, fruto de la deriva litoral muy disminuída por falta de aportes tributarios que le acerquen calor y así fortalezcan su entropía, convecta a 90º respecto de la línea de frente litoral y se ocupa de erosionar todas las riberas donde opera, descubriéndolas la imagen satelital con el perfil propio de los dientes de un serrucho.

Los sedimentos de estas erosiones, cargados de energía solar, son motores vehiculizadores de las aguas que los transportan y facilitan su acople a otro sistema de mucho mayor energía, que a poco les espera. 

13º. Qué función cumple la deriva litoral en las salidas tributarias

La principal función es asistir con el apropiado gradiente térmico e hidroquímico, la esperada asociación termodinámica, sin la cual ningún tributario conocería salida. El ojo del plomero conectando cañerías a 90º, aquí no funciona. Ver imágenes de direcciones de salidas en hidrogeomorfología histórica y en los presentes que aún se conservan naturales.

14º. Qué función cumplen las salidas tributarias en la deriva litoral

La principal función de éstas es sumar temperatura en la parte posterior del sistema, de manera de mantener el rango de diferencias térmicas que éste reclama para sostener su advección; siempre guiada por un gradiente de ligera menor temperatura en la parte delantera del sistema.

Cuando esas diferencias desaparecen, el sistema de deriva litoral rápidamente pega una curva de 180º y se suma al corredor natural de flujos en descenso.

15º. Qué sucede con la deriva litoral en ausencia de un corredor natural de flujos costaneros

En tales circunstancias la deriva pierde sus anchos normales, que en nuestros caudales estuariales en poco superan los 100 m, para mostrarse divagante en busca de un gradiente apropiado aunque ésto la obligue a salirse de rumbo y mostrarse obesa en anchos de hasta 4 km, como sucede de Núñez hacia el NO buscando de asociarse a los flujos que escapan hacia el SO desde el canal Mitre .

16º. Qué sucede en ausencia de deriva litoral

Sucede lo que ya hemos explicado en el punto 12º: la deriva litoral se transforma en convección externa y por ende, en erosión directa de playas y riberas, arrastrando arenas, árboles, rutas, grandes hoteles y todo lo que se le ofrezca devorar.

Lejos de apreciar sacar las aguas tributarias, que por sus sombras y temperaturas disminuídas ha visto precipitar internamente sus sedimentos, las energías convectivas buscan su alimento en calor y sedimento, robándolo de las riberas.

La marcha de este exilio concluye en el acople al corredor natural de flujos costaneros estuariales; que a poco se verá atraído y comprometido con el corredor de cruce estuarial Alflora, que subiendo de Samborombón y hacia el NE, marcha al doble de velocidad 

17º. Qué intervención apuran las derivas de cruce o de plataforma

Las derivas de cruce (corredor Alflora), o de plataforma (las que arrancan de los llamados bancos alineados y se suman a la que viene del banco de pescadores al Sur de Mar del Plata), se caracterizan por su gran escala de energías, invitando a asociarse a cualquier sistema de flujos que se le acerque o cruce en el camino.

Así por caso reitero, el corredor Alflora reconociendo velocidades de hasta 2,7 nudos/hora, se devora sin perturbarse, al sistema que discurre por la costa bonaerense a 1,3 nudos/hora. Este sistema previamente se vió obligado a enriquecer sus energías para asistir tal acople y para ello se cargó de los sedimentos de las riberas que erosionaba en su recorrido.

Los tributarios, ver http://www.alestuariodelplata.com.ar/atalaya3.html reitero, dejaron de hacerlo, pero la convección externa con sus robos fue la herramienta para reponerlos. Estos acoples son los que prueban que no hay sistemas "negativos". El cambiar de montura está lleno de fenómenos positivos.

Esos que hacen que la voz entropía recupere su versión primigenia: raíz indoeuropea *trep- volver, girar; en sánscrito, trápate cambiar de sitio; en griego entropia, cantidad que se mantiene constante en un cuerpo tras sus diferentes transformaciones; como expresión que apunta al movimiento perpetuo en brazos de Natura reinando por doquier e imposible desde modelo aislado considerar viable. 

18º. Qué es un cordón litoral de salida tributaria estuarial

Los sedimentos que vienen suspendidos en aguas tributarias se encuentran en la misma salida estuarial, con diferencias de temperaturas en el borde externo de sus aguas, que entonces, por capa límite térmica, se ven obligadas a dejar allí sus cargas.

Estas manifestaciones han sido calificadas como de borde cuspidado, para realzar la prolijidad de esas formaciones; que de acuerdo a los caudales y energías en juego, logran alcanzar hasta los 5 m de altura y extensiones de más de 100 Kms de longitud. 

19º. Qué diferencias interpretativas van de la mecánica a la termodinámica.

Estos cordones, al igual que las derivas litorales, son interpretados como fruto de la famosa ola oblicua. Siendo el caso, que por dar un ejemplo, en el frente deltario central no hay tal ola oblicua; y en la costa uruguaya muestran los mismos comportamientos y direcciones de salida hacia el NO, a pesar de que el pampero sopla de frente. 

20º. Dos razones de muerte de un tributario.

Son suficientes, tanto los desacoples de las baterías convectivas tablestacando y alteando riberas; como disociando térmica e hidroquímicamente las aguas tributarias, de las aguas del cuerpo receptor.

Por cierto, a estas torpezas se suman otras como la de eliminar meandros, rectificar y canalizar cursos; permitir la sedimentación en la boca de salida y así provocando un aumento de temperatura de las aguas, cuyo gradiente está solicitando por el contrario y allí mismo, uno en gradual disminución. 

21º. ¿Acaso alguna vez advertimos compromisos entre los meandros y las dinámicas horizontales de los cursos de agua?

Jamás. Las respuestas siempre fueron rectificar y canalizar. Esta primaria decisión del ojo mecánico fue la que determinó en 1904 la rectificación de 27 Kms del Matanzas-Riachuelo y concluídas sus obranzas en 1936.

Un siglo más tarde, el presidente del ACUMAR, Ing Gustavo Villa Uría, en oportunidad del cierre de primer congreso internacional de Ingeniería, CII 2010, confesó que esas obranzas habían sido un fracaso; pero sin arriesgar a explicar el por qué. Había identificado el pasivo, pero no el activo perdido.

Eso mismo expresó el ACUMAR en Febrero del 2012, cuando al hacer balance del año anterior en donde habían gastado 7400 millones de pesos –un 80% más que los 4.088 del presupuesto del Poder Judicial de la Nación-, confiesan no saber cómo identificar el pasivo del famoso plan de saneamiento que la CSJN venía impulsando (PISA MR). Ese pasivo se había manifestado en Abril de 1786. 226 años y aún no lo habían descubierto. Dificil es imaginar un ojo más tuerto. 

22º. ¿Qué advertencias alguna vez reconocimos del carácter dinámico de los propios meandros? Mostramos imagen del río Negro para responder.

Esta imagen debería dejar los ojos en blanco y las neuronas confundidas, por no decir, incendiadas.

Las advecciones reconocen asistencias convectivas transversales -en nada externas o negativas, pues conservan su servicialidad interna y bien positiva-, llamadas, no solo a hacer aportes dinámicos, sino también a aumentar el contraste térmico en ambos extremos del sistema; que como ya expresamos, marcha hacia un gradiente de ligera menor temperatura.

Si no logramos resaltar ese gradiente en el extremo terminal del sistema, pues entonces igual lo apreciamos en la cabecera inicial. Si aumentamos aquí la temperatura, así entonces prolongaremos la entropía del sistema.

Cada curva de un sistema meandroso hace estos aportes. Que comienzan en la margen suave del arroyo para buscar la margen abrupta y más profunda, pues allí se expresan los gradientes que van de lo caliente a lo frío en un zigzagueo de transversalidades de dinámicas inagotables. La resultante de esa incorporación de energía, de meandro en meandro, de ribera suave a ribera profunda y sombría, se suma a la longitudinal; a la advección. Cuando la planicie extrema sus chaturas, los cursos de agua extreman sus recursos meandrosos; que no son ociosos, sino el alma activa multiplicando del sol la expresión transformadora para nunca ver demoradas sus cargas de tan inquietas energías.

Lo opuesto es lo que sucede con los sarcófagos pretendidamente "hidráulicos" de los que tenemos muestras con resultados horrorosos en todas las obranzas en llanuras. Ver salida del Aliviador al Luján cuyas aguas, tampoco son del Luján

23º. ¿Qué motivos descubren los cursos de agua e incluso los estuarios, para mostrar riberas opuestas, unas suaves y otras escarpadas?

Pues esta misma. El cratón del Río de la Plata es tan chato como plano y su pendiente oscila en los 4 mm x Km. No tenemos un estuario meandroso; pero si tenemos uno con costas suaves y barrosas y la opuesta más atractiva.

Recordemos que los sedimentos son motores vehiculizando las aguas. Tan importante considerar los gradientes térmicos que operan estos sistemas, como las baterías convectivas móviles (sedimentos) que las apuran.

24º. unas de aguas claras y otras muy sedimentadas; cómo pesa en términos dinámicos su diferencia.

Fotos del Solimoes y el Negro, del Paraná y el Uruguay, del Paraná y el Paraguay. Ejemplos de asistencias vitales e irremplazables; llenas de contraste.

25º. qué pobre reconocimiento tenemos de las convecciones transversales arrancando en las riberas suaves, para ir mutando a longitudinales en las opuestas riberas abruptas, cuyo perfil de fondo se muestra algo más profundo.

26º. Qué sentido tiene cerrar los ojos a toda esta fenomenología de los gradientes que participan estas decisiones y son los únicos responsables en sus dinámicas horizontales, de que estos sistemas funcionen.

El único sentido es frenar el despeñadero de millones de personas que han pasado por academias y han obrado desastres de todas las escalas en planicies extremas.

Dar vuelta el paradigma mecánico no es gratis. Millones de almas sufrirán la caída de una cosmovisión simple que generó convicción por miles de años.

A ellas no resultará simple pasar a otra bastante más compleja que echa por tierra todo lo anterior.

Recordemos que la etapa de modelización aún no comenzó. Esto les permitirá seguir cerrando los ojos e insistir con sus posturas “científicas”, aunque sean obtusas fabuladoras de energías gravitacionales donde no las hay. Las modelaciones de caja negra dan para cualquier cosa. 

27º. De la calificación de sobreajustada y subajustada que se atribuye a los cursos de agua.

La observación de cursos de agua que parecen ir muriendo ha dado lugar a estas expresiones; que por cierto, más fácil resulta advertirlos en planicies extremas, que en suelos que reconocen apropiadas pendientes.

Como estas observaciones cabe respondan a disminución en el régimen de lluvias, haremos diferencias. Sólo consideraremos la condición subajustada en situaciones que no adviertan disminución del régimen de lluvias. 

28º. Quién es el más responsable de la condición subajustada: Madre Natura o la ingeniería hidráulica? 

29º. Veamos cómo resuelve Madre Natura los subajustes que ella misma ha creado. Ver caso del redoblamiento de los cordones litorales cuando el activo agota o colmata el seno entre cordones, tras siglos o milenios vivos.

Veamos cómo el cauce del Bermejo (San Lorenzo) descubre subajustes y sobreajustes en los cambios estivales anuales. Y cómo se anticipan y complementan 

30º. Veamos cómo el hombre redobla los problemas, cuando intenta resolver los subajustes que él mismo ha provocado. Empieza canalizando; termina entubando.

El río Luján es un curso de agua cuya cuenca baja hace 3.500 años estaba por completo sumergida en aguas del mar querandinense. Los últimos 50 Kms del actual curso del Luján eran parte del mar.

La confluencia con el Carabassa se reconoce en los 7 m IGM, allí donde las arcillas hidromórficas verdosas lucen a pleno. Otro tanto ocurre con el Pinazo y el Burgueño antes de confluir en el Ar Escobar. Todo eso era mar.

Que al retirarse solicitaba adicionales esfuerzos para concluir sus accesos al estuario; pues esos últimos kilómetros eran de planicie extrema y allí nada tenía que hacer la administración hidráulica para fastidiar como lo ha hecho habilitando rellenos de bañados, rectificaciones de cursos, reducciones ilegales de restricciones, ojos cerrados a obligadas cesiones, saneamientos de suelos anegables prohibidos, alteos de riberas, polders para aislar barrios monumentales en perjuicio directo de todos los vecinos; tanto los de aguas abajo como los de aguas arriba; pues a unos y a otros, a más de embalsamientos roban áreas de acumulación de energías convectivas; únicas fuentes de sus dinámicas, en consideración a los respetos que en especial debemos a los flujos ordinarios mínimos.

Ver “los expedientes del valle de Santiago” por http://www.delriolujan.com.ar/EVS_1.html

31º. Ver cómo el ojo mecánico está por completo incapacitado para mirar estos problemas.

El ojo mecánico no está solo en los ingenieros hidráulicos. Está también en el Asesor General de Gobierno que en su Vida ha escuchado hablar de energías convectivas y al igual que sus abuelos sigue creyendo que las aguas se mueven por pendientes.

Y está en los ministros de la SCJPBA y de la CSJN, que no entienden qué pasa con el famoso PISA MR, y mucho menos con el Reconquista al que ya le aplicaron miles de millones de dólares y cada vez se descubre más MUERTO.

Por este despiste que cargan academias, ministerios, legislaturas y altas magistraturas judiciales, todos se sacan de encima la responsabilidad de mirar, de estudiar y juzgar, pues también a ellos les cuesta dejar la razón simple para abrir ojos a lo complejo.

Todos los recursos procesales para mandar a pasear causas a tribunales inferiores, son aplicados sin dudar un minuto de las ventajas o miserias de esos lavados de mano y de traseros.

En el colapso del año 2013 en la Plata los cadáveres aparecían a metros del palacio de Justicia. Y allí no había problemas de falta de energías gravitacionales. Las había de sobra. Sólo que, al llegar al terraplén ferroviario de Tolosa se encontraban con un embalse de más de un siglo, al que nunca prestaron la más mínima atención.

Basta ver el camino lateral al Ar Gato que pasa por abajo del puente ferroviario robándole ancho al cauce. Basta ver cómo este problema del embalse pretendió ser resuelto con alteos en las riberas.

Todo un infierno de miserias decisivas de mentes aburridas, que un siglo más tarde eran declamadas por el Director de Hidrología de la UNLP con lágrimas de cocodrilo.

El sábado 5 de Abril del 2014, el diario La Nación anoticia en su nota Polémica por los muertos en La Plata , que los muertos de La Plata podrían haber superado las 360 víctimas. Subí entonces este comentario:

Desde el primer día señalé que los cuerpos que salieron volando por el Ar Gato hacia el estuario tras cruzar el puente del FFCC en el impúdico embalse de Tolosa, deberían con holgura haber superado el centenar de víctimas, si en el casco urbano ya reconocían a 59.

Ver  http://www.hidroensc.com.ar/tolosa.html y 5 html siguientes.

Estas aberraciones en el diseño de la red de entubados de La Plata son propias de una época en donde no contaban con la información hidrológica apropiada. Pero tuvieron 100 años para darse cuenta y no hicieron otra cosa que generar alteos en el Ar Gato para que los barrios aledaños quedaran transformados en bañaderas.

En lugar de alteos era necesario respetar los retiros de 100 m que marca el dec 11368/61, regl de la ley 6253 y ampliar las luces de los puentes, en especial, el del terraplén del FFCC. El Dpto de Hidrología de la UNLP es corresponsable de estas miserias cognitivas. Francisco Javier de Amorrortu.

En más de 100.000 lectores, fue el único.

Tienen razón el AGG y los ministros de la SC en no darse por enterados. Sin duda, mientras el ánimo de ser competentes sea la cuestión -y con el cero nadie compite-, el Futbol para todos, es la solución.

Los dineros en obras no sólo inútiles, sino ruinosas, continuarán. Ni siquiera se pondrán de acuerdo en la cantidad de cadáveres.

Es intuíble que la inseguridad pase por los malos ejemplos que descienden desde arriba y dejan su miseria sembrada en todos los estratos de la sociedad. Este de las garantías hidráulicas es parecido y viene desde arriba; o mejor dicho, desde la tumba de Newton.

32º. Ver cuán abismal es para este ojo aceptar el cambio de paradigma mecánico por ojo termodinámico. 

33º. Ver el desliz, la rápida interpretación que hace el ojo mecánico por termodinámica de cajas adiabáticas cerradas.

Cuando a un ojo mecánico se le cruza la palabra termodinámica, de inmediato apunta a termodinámica de cajas adiabáticas cerradas. Un poco más de lo mismo. Un motor asistido por un tanque de combustible que se quema y pronto agota.

Lejos de imaginar los sistemas naturales olárquicos abiertos de movimiento perpetuo, cuyo único combustible es el sol. Ya hay aviones que recorren nuestros cielos cercanos sin jamás detenerse, alimentados por energía solar. Pero no hay neurona de ingeniero hidráulico que quiera mirar por ella. 

34º. Ver cómo nunca advirtió el concepto de entropía sosteniendo movimiento perpetuo merced a energía solar, que él siempre interpretó gravitacional. 

35º. Ver cómo con modelaciones de caja negra eluden enfrentar este abismo de la cosmovisión hidráulica en planicies extremas. 

36º. De los problemas del lenguaje trillado por los mercados, para hacerse una fiesta con cualquier criterio que apunte a mostrar estos abismos. 

37º. Del sentido que tiene para este taller, rescatar la definición de ecosistema que regala el Anexo I de la ley 11723

ECOSISTEMA: Sistema relativamente estable en el tiempo y termodinámicamente abierto en cuanto a la entrada y salida de sustancias y energía. Este sistema tiene una entrada (energía solar, elementos minerales de las rocas, atmósfera y aguas subterráneas) y una salida de energía y sustancias biogénicas hacia la atmósfera (calor, oxígeno, ácido carbónico y otros gases), la litósfera (compuesta por humos, minerales, rocas sedimentarias) y la hidrósfera (sustancias disueltas en las aguas superficiales, ríos y otros cuerpos de aguas). 

38º. Del sentido que tiene olvidarse de esta definición, para aplicarse a las que a diario escuchamos regalan a las voces ecología y ecosistema. 

39º. Del sentido que tiene acercar la voz "ekusistema" para recordarnos los enlaces velados y/o ignorados que son vitales para el movimiento perpetuo, que ya descubría la versión griega de entropía, hace 2500 años

La lingüística histórica nos acerca el morfema ku-, como base hipotética de palabras que significan espacios vacíos, de relaciones faltantes, de lazos y vínculos sin definir.

Pues entonces, hacer con la voz ekulogía, diferencia de la voz ecología -que ya no es dable delimitar en sus usos porque todos protestarían-, nos remitiría a esas relaciones de sistemas y entre sistemas, sin reconocimiento, que Marc Sagoff nos advierte faltan definir. 

40º. Del sentido que tiene recordar que la voz Bi-os, Vida, reconoce la presencia de dos seres. Que al estudiar la biología la singularidad del ser, no resuelve esta dimensión del Bi-os; el de la integridad de la Vida en la integración de dos seres, de dos sistemas o de todo lo que descubramos apareado. Aunque sea el uno y el cero de las computadoras cuánticas.

Que el bio-centrismo habla de singularidad, ajena por completo a la callada fecundidad del enlace entre dos. Por ello, antes de mentar bio-centrismos, cabe mentar bio-enlaces. Ecosistemas, sin bio-enlaces, siguen conduciendo a ciencia cada vez más particionada.

Ésta seguirá haciendo su camino, pero es hora de advertir que la integración del conocimiento de los enlaces es parte fundamental que ha sido dejada de lado, no obstante vemos cómo de mil formas, en ojos perplejos y en avatares, golpea nuestros sentidos. Sus vacíos quedan resueltos con modelación matemática

Recordar que la voz Füsis refiere del engendrar, del brotar, fruto de los abismos encimados de esos dos seres, atravesados por el eje vertical de la elevación de los esfuerzos y el horizontal de los afectos. Esto no surge por una ventana físico matemática 

http://www.alestuariodelplata.com.ar/alosriosyesterostributariosdelestuariodelplata.pdf

Con las debidas Gracias a mis Queridas Musas Alflora Montiel Vivero. Estela Livingston y Julieta Luro Pueyrredón

Francisco Javier de Amorrortu, 5 de Abril del 2014

Sigue a pág. 61